sábado, 26 de marzo de 2016

Queso de cabra rebozado en almendra






Ingredientes

2 rulos  de queso de cabra
50 g de harina
120 g de almendras ecológicas crudas en cubitos o láminas
2 huevos batidos
100 ml de aceite de oliva virgen extra






Elaboración
Sacar el queso de la nevera en el momento de prepararlo para que esté firme. Batir los huevos y picar las almendras en una picadora hasta que queden  en cubitos (no molidas).
Cortar el queso en rodajas de algo más de 1 cm de grosor, pasarlas por la harina y el huevo batido. A continuación  apretar las almendras sobre el queso para que formen una costra fuerte de forma muy rápida para que no se caliente el queso y pierda su firmeza. 
Poner en freidora el tiempo justo hasta que se doren o hacer a la plancha con un buen chorro de aceite dando la vuelta para que se tuesten  por ambas caras. Hay que tener cuidado en cualquier caso porque las almendras se queman muy rápido.
Mejor servir inmediatamente para apreciar el queso fundido en el interior pero también resulta delicioso a temperatura ambiente. 
Se puede presentar con un fondo de mermelada de tomate o sobre una buena ensalada verde con varios tipos de lechuga y un puñado de almendras fileteadas, previamente tostadas. 
En lugar del queso de cabra se puede emplear cualquier otro queso cremoso como  Brie, Camembert, o Edam siempre que previamente se haya enfriado en el frigorífico. 

viernes, 11 de marzo de 2016

Pastel de espinacas con almendra

Ingredientes 
Para la masa:
350 g de harina
250 g de mantequilla
50 g de almendra molida
1 huevo
sal
Para el relleno:
150 g de espinacas
100 g de almendras ecológicas laminadas
3 huevos
200 ml de nata
1 diente de ajo
100 g de jamón ibérico
100 ml aceite de oliva
Sal según gusto


Elaboración
Para preparar la masa montar la mantequilla con una batidora de varillas. Incorporar la harina poco a poco hasta que quede totalmente integrada. Añadir los huevos y la almendra molida. Continuar mezclando hasta conseguir una bola homogénea. Dejar que repose alrededor de una hora.
Espolvorear con harina una superficie limpia y estirar la masa con ayuda de un rodillo. Una vez logrado un grosor de mas o menos 1/2 cm., forrar con ella un molde redondo, poner encima un puñado de garbanzos para que no se suba la masa y hornear a 190ºC durante diez minutos con el horno previamente caliente.
Mientras escaldar las espinacas en una cazuela con un poco de sal.
Picar el jamón, laminar el ajo y rehogar  todo en una sartén con el  aceite de oliva.
Poner las espinacas bien escurridas en el vaso de la batidora, agregar el sofrito de jamón. Triturar y añadir la nata, los huevos y batir muy bien. Volcar la mezcla sobre la masa ya hecha y hornear a 190ºC unos quince  minutos.
Esparcir por encima las almendras laminadas y gratinar solo cinco minutos más. Desmoldar una vez que se haya templado. Servir inmediatamente.

Boquerones adobados con rebozado de almendra




Ingredientes
1/2 kg  de boquerones
10 g de pimentón dulce de la Vera
25 g  de orégano
10 g  de comino en grano
3 dientes de ajo
25 ml de vinagre de Jerez
75 g de almendra ecológica molida
150 ml de aceite de oliva virgen extra para freír
Sal según gusto





Elaboración
Limpiar los boquerones quitándoles la cabeza, las tripas y la espina. Preparar  el adobo machacando en el mortero los tres dientes de ajo, añadir el orégano y los cominos y agregar  el pimentón dulce, el vinagre y un poco de agua y volver a machacar. Pasar a un bol y si es necesario añadir un poco de agua para que cubra bien el adobo los boquerones durante una hora. A continuación rebozar en la almendra molida y un poco de orégano y  freír en pequeñas tandas en la sartén con el aceite no muy caliente para que no se queme la almendra,   
Una vez fritos, sacarlos y poner sobre un papel absorbente de cocina para eliminar el exceso de aceite. Servir inmediatamente.

Nota: El boquerón es un pescado azul económico y muy rico en vitaminas B3 y B6. Aporta también minerales como hierro, potasio, yodo, magnesio y sodio.  La grasa presente en los pescados azules es rica en ácidos grasos omega-3, que contribuyen a disminuir los niveles de colesterol y triglicéridos plasmáticos, aumentando además la fluidez de la sangre, lo que ayuda a  prevenir  la formación de coágulos o trombos.

domingo, 6 de marzo de 2016

Salsa Romescu con almendra para los calçots

Esta salsa es la que acompaña a los celebres calçots catalanes (cebolletas largas que se asan a la brasa). En toda Cataluña son consumidos en el campo a finales de invierno donde amigos y familiares se reúnen para degustarlos.
Es uno de mis más remotos recuerdos gastronómicos, los descubrí de niña en un viaje con mis padres y mis primos a una masía de Lérida, allí aprendí una de las más bellas palabras catalanas: Benvingut.

El calçot, tal y como se saca de la tierra, se asa sobre una llama viva sin esperar a que se hagan brasas. Luego se envuelve en periódicos para que el calor se conserve entre sus  páginas y la planta se cueza dentro. Antes de introducirse en la boca se impregna en esta salsa que es parte imprescindible del ritual y que cada casa prepara de una  forma diferente pues se trata de un preparación de carácter y origen  rural, pero en todas ellas es imprescindible la presencia de la almendra.
Una buena excusa para acercarnos a Cataluña, escuchar de nuevo la hermosa palabra y confraternizar con su gente.




Ingredientes

6 tomates rojos grandes
1/2 cabeza  de ajos
La carne de dos ñoras
2 galletas María  o una rebanada de pan tostado
150  g de almendra ecológica tostada
100  g de avellana tostada
150 ml de aceite de oliva virgen extra
75 ml de vinagre de Jerez





Elaboración
Asar los tomates y la media cabeza de ajos, cuando se desprenda la piel pasarlos al vaso de la batidora, añadiendo el resto de los ingredientes hasta conseguir la textura deseada.
La forma de comer los calçots forma parte del encanto de la fiesta. Es imprescindible ponerse un largo babero para protegerse del tiznado de la brasa que cubre la parte blanca del calçot. Se agarra con la mano izquierda por el tallo verde y, con la derecha , se le despoja de la capa exterior calcinada y se unta bien en la salsa y finalmente se saborea ante la mirada divertida del resto de los comensales.