Ingredientes
4 huevos
1/2 l de leche
175 g de azúcar
1 vaina de vainilla
50 g de almendras ecológicas
Elaboración
Separar las claras de las yemas de huevo.
Batir las claras a punto de nieve, añadir treinta gramos de azúcar y batir de nuevo durante un minuto.
Poner a cocer la leche y una vez que ha entrado en ebullición bajar el fuego a intensidad media. Sumergir grandes trozos de clara de huevo con la ayuda de dos cucharas en la leche y escalfarlos dándoles la vuelta aproximadamente un minuto por cada lado. Depositarlos en un plato cubierto con papel de cocina.
Cortar la vaina de vainilla longitudinalmente y, junto con las semillas, agregar a la leche y poner a hervir durante cinco minutos. Colar
En un bol grande batir las yemas con la mitad del azúcar, hasta que la mezcla adquiera un color amarillo pálido.Verter poco a poco la leche caliente encima y pasar esta mezcla a una cacerola grande.
Calentar a fuego medio hasta que espese. Verter en las copas en las que se servirá y dejar enfriar.
Mientras, calentar el resto del azúcar con dos cucharadas de agua en un cazo hasta que comience a derretirse y se convierta en un jarabe dorado.
Finalmente colocar una pieza de clara de huevo sobre la crema, rociar con el caramelo y cubrir con las laminas de almendra ligeramente tostadas.
Servir inmediatamente.
Nota:El único paso un poco complicado de esta receta de origen francés es el de escalfar las claras de huevo (las islas que dan nombre a la receta) ya que deben permanecer lo suficientemente firmes como para ser depositadas y flotar en la superficie de la crema.